octubre 24, 2018

Fernando Haddad y lo que está en juego en Brasil

Hace solo unas semanas, y tras un enorme revuelo mediático, la dirección nacional del Partido de los Trabajadores de Brasil confirmó a Fernando Haddad como candidato presidencial después de conocerse que los rejuegos político-judiciales de la derecha de ese país dieron resultado e impidieron la candidatura de Luis Inacio Lula da Silva, quien se encuentra arrestado desde el pasado 7 de abril para cumplir una pena de 12 años por corrupción pasiva y lavado de dinero.

Hasta este martes, varias encuestas en el Gigante Sudamericano confirman que el candidato petista alcanza ya un 19 por ciento de intención de voto, un crecimiento de 11 puntos respecto al sondeo anterior, y es aventajado solo por el aspirante de la extrema derecha Jair Bolsonaro, del Partido Social Liberal (PSL) que llega a un 28 por ciento.
En ese sentido, toda la campaña del PT se concentra en la fórmula «Lula es Haddad, Haddad es Lula», lo que se ha convertido en una lucha en contra del tiempo —solo restan algo más que 20 días hasta la primera vuelta—, pero también en contra de la dificultad de información.

Los grandes periódicos conservadores brasileños, pese a la agresiva propaganda electoral y trampas informativas que persiguen denigrar la imagen del candidato popular, ya empiezan también a cuestionarse qué posiciones tendría Haddad, en caso de ser electo, sobre temas muy sensibles para ellos, como el mismo modelo económico neoliberal, las privatizaciones, la reforma tributaria, entre otros.

Pero, ¿quién es Fernando Haddad? y ¿por qué puede ser él el que ponga freno a la debacle política que vive ese país sudamericano?

Este joven intelectual de ascendencia libanesa es Licenciado en Derecho por la Universidad de Sao Paulo y está especializado en Derecho Civil, además de alcanzar un Máster en Economía y un Doctorado en Filosofía. Comenzó desde 1983, con su afiliación al PT, en la vida política nacional.

En 2012, arrancó la carrera electoral para alcalde de Sao Paulo como un desconocido para los votantes. Y estos le han compensado hoy con el triunfo en la mayor ciudad del país gracias a su duro trabajo y a una intensa campaña del PT. En su programa de gobierno, Haddad hace referencias a la novedad, el cambio y la renovación.

Fernando Haddad ha escrito cinco libros que analizan, desde una postura crítica, al socialismo soviético. Es padre de dos hijos y está casado con su novia desde la secundaria.

Pese a esta estela de renovación y pulcritud política que se da a entender de las posturas de Haddad, los retos son muchísimos.

Brasil vive hoy una crísis democrática sin precedentes, donde una presidenta reelegida por el voto popular ha sido sacada del gobierno sin ningún justificativo legal, y un ex-presidente, favorito para triunfar en las elecciones, ha sido procesado sin pruebas, condenado por “convicciones” y preso, para que no fuera elegido otra vez presidente.

Revertir esa ofensiva conservadora, que se extiende a varios países de América Latina, será un enorme problema para el gobierno del PT, ya que la mayoría de las estructuras gubernamentales de esa nación están viciadas por la corrupción, la ideología política y otros fenómenos.

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